Cinco lecciones aprendidas tras 10 años en el cumplimiento normativo
En la última década, el cumplimiento de la normativa ha evolucionado significativamente debido a la aparición de nuevas tecnologías, los cambios en la dinámica geopolítica y la evolución de las prioridades de aplicación. Las empresas que se adaptan a normativas complejas pueden beneficiarse de los conocimientos adquiridos en diez años de experiencia en la mitigación de riesgos y la adaptación eficaz de estrategias.
En esta entrada de blog, para celebrar el 10º aniversario de Trans World Compliance, profundizamos en las valiosas lecciones aprendidas tras una década en el negocio del cumplimiento normativo. A partir de los testimonios proporcionados por los expertos del sector Dave Olenzak y Dan Peak, exploramos temas clave que van desde la lenta adopción de normativas como CRS y FATCA hasta la evolución de los entornos de cumplimiento y la dinámica del mercado.
Testimonios de expertos
Dave Olenzak, fundador de TWC, y Dan Peak, presidente de TWC, son dos personas profundamente arraigadas en el mundo del cumplimiento normativo. Sus puntos de vista aportan valiosas experiencias y observaciones de primera mano sobre los retos y oportunidades encontrados en la última década.
La perspectiva de Dave Olenzak
Cuando fundé la TWC, pensaba que la curva de adopción sería más lenta que la de la lucha contra el blanqueo de capitales, pero mucho más rápida de lo que es. En 1990, la FAFT promulgó normas en materia de lucha contra el blanqueo de capitales, pero no fue hasta 2001 y los atentados del 11 de septiembre contra el World Trade Center cuando las cosas se aceleraron. La USA Patriot Act se promulgó para reforzar las normas de lucha contra el blanqueo de capitales. Hubo reivindicaciones contrapuestas de varios proveedores de listas de vigilancia que afirmaban tener a los autores en sus listas de vigilancia, y los gobiernos de todo el mundo temían otro atentado. La intención era interrumpir la financiación de los terroristas para obstaculizar eficazmente sus actividades.
Suponía que la codicia, y no el miedo, impulsaría el cumplimiento de CRS y FATCA. La idea de que un país pudiera obtener millones o miles de millones de ingresos adicionales reduciendo el número de defraudadores fiscales parecía bastante atractiva. Además, los gobiernos podrían demostrar que obligan a los ricos y poderosos a cumplir las mismas normas que todos los demás.
Ojalá pudiera pintar un panorama halagüeño del cumplimiento de la CRS y la FATCA, pero no puedo. Se han impuesto multas de miles de millones de dólares por infracciones del ALD (normalmente intencionadas y sistémicas). Hay incoherencias en la regulación de CRS y FATCA, y es difícil identificar sanciones significativas. Ninguna acción importante de ningún gobierno haría que un consejo de administración se sentara y empezara a hacer preguntas difíciles a los departamentos de cumplimiento. Las empresas no están haciendo nada o muy poco en relación con el cumplimiento de CRS y FATCA. Algunos departamentos de cumplimiento con visión de futuro se lo están tomando en serio y están informando correctamente. Sin embargo, en lo que respecta a la recuperación por parte de las autoridades fiscales de los ingresos fiscales perdidos, no puedo señalar ninguna. El resumen del Inspector General del Departamento del Tesoro muestra que tras siete años de recopilación de datos, el IRS gastó 500 millones de dólares y recuperó cero dólares en ingresos fiscales perdidos.
Supongamos que queremos analizar los beneficios de esta lenta curva de adopción. En ese caso, se trata de una pequeña empresa con recursos limitados. Si la curva de adopción hubiera sido más rápida y el mercado más amplio, las grandes empresas se habrían lanzado con más recursos y no habríamos tenido tiempo de desarrollar nuestro software y eliminar los errores. Para las autoridades fiscales, hay dos competidores. Hay poca competencia en el software CRS y FATCA para instituciones financieras. Hay algunos sistemas de gama alta y algunos convertidores XML de gama baja. Yo veo los sistemas de gama alta como Rolls-Royce y nuestro sistema como el Ford de cualquier persona. Si una autoridad fiscal empezara a tomarse en serio los informes CRS y FATCA, estaríamos bien posicionados para aprovechar el mercado.
Perspectiva de Dan Peak
Opinión: El entorno de aplicación de la ley es la gran diferencia de los últimos diez años. Aunque se han producido avances notables en la supervisión reglamentaria, sigue habiendo áreas críticas en las que la aplicación de la normativa ha evolucionado a un ritmo diferente del de las medidas de cumplimiento.
Ejemplos recientes subrayan la necesidad de sanciones más severas para las infracciones. Consideremos el caso ampliamente difundido de JPMorgan, que utilizó transmisiones de comunicaciones seguras para eludir la supervisión reglamentaria. A pesar de esta clara infracción, la sentencia y la multa resultantes se consideraron insignificantes, lo que plantea dudas sobre el efecto disuasorio de las sanciones.
Del mismo modo, la reciente sentencia contra un multimillonario británico residente en las Bahamas por numerosas infracciones de información privilegiada pone de relieve la insuficiencia de las medidas coercitivas para hacer frente a delitos financieros complejos. El carácter trivial de la multa impuesta no refleja la gravedad de los delitos cometidos, lo que pone en duda la capacidad de los organismos reguladores para exigir responsabilidades a los infractores.
Sin embargo, el problema principal va más allá de los casos individuales: radica en la incapacidad general de las autoridades estadounidenses para combatir la evasión fiscal con inversiones en el extranjero. El presupuesto del IRS se trata como un balón de fútbol político, con una inversión y un apoyo insuficientes para crear un marco sólido de detección y aplicación de la ley. A pesar de las importantes inversiones de tiempo, esfuerzo y dinero de los contribuyentes, el rendimiento de estas inversiones ha sido mínimo, por no decir insignificante.
No se trata de un relato de derrota, sino de una llamada a la acción. Estados Unidos debe asumir el liderazgo y dar ejemplo al resto del mundo en materia de cumplimiento de la normativa. Reforzando los mecanismos de aplicación y fomentando la colaboración con otros países declarantes, podemos acercarnos al logro de la equidad fiscal y la rendición de cuentas a escala mundial.
A modo de reflexión, la última década ha puesto de manifiesto deficiencias en la eficacia de la aplicación, pero también presenta una oportunidad para un cambio significativo. Aprovechemos esta oportunidad para revitalizar nuestro compromiso con el cumplimiento y la aplicación de la normativa, garantizando la integridad y la confianza en nuestros sistemas financieros para las generaciones venideras.
Los simples ejemplos pueden ser objeto de debate, pero lo más importante es saber dónde están los titulares relativos a la aplicación de la legislación. Nuestra historia de la última década pone de relieve un claro patrón de disminución de los casos de aplicación de la legislación en los últimos diez años.
Estos testimonios aportan una valiosa visión de la realidad del cumplimiento de la normativa, subrayando la importancia de ser adaptable, innovador y estratégico a la hora de navegar por el intrincado panorama normativo.
Cinco ideas aprendidas
A medida que exploramos los retos y oportunidades del cumplimiento normativo, se hace evidente que aprovechar las lecciones aprendidas de testimonios como los de Dave Olenzak y Dan Peak es esencial para dar forma a estrategias de cumplimiento normativo eficaces en los próximos años. He aquí cinco ideas aprendidas tras diez años en el negocio del cumplimiento:
1- Curva de adopción lenta y discrepancia en la aplicación: A pesar de los beneficios financieros potenciales, la adopción de normativas como CRS y FATCA ha sido más lenta de lo previsto. Mientras que las normativas de lucha contra el blanqueo de capitales se aplicaron rápidamente tras el 11 de septiembre debido a la urgencia provocada por el miedo, aún no se ha materializado el mismo nivel de aplicación y cumplimiento para normativas relacionadas con la fiscalidad como CRS y FATCA.
2- Falta de aplicación rigurosa: Si bien se han impuesto multas de miles de millones de dólares por infracciones de la legislación contra el blanqueo de capitales, la aplicación de la CRS y la FATCA ha sido incoherente y carente de firmeza. Las multas significativas o las acciones gubernamentales para exigir el cumplimiento son poco frecuentes, lo que lleva a la complacencia entre algunas empresas con respecto a sus esfuerzos de cumplimiento.
3- Limitación de recursos y posicionamiento en el mercado: Para las empresas más pequeñas, como la TWC, la lenta curva de adopción ha supuesto una oportunidad para desarrollar software de cumplimiento sin tener que hacer frente a una competencia significativa por parte de empresas más grandes. Sin embargo, la falta de aplicación también significa que el crecimiento potencial del mercado está supeditado a que los reguladores se tomen más en serio la presentación de informes CRS y FATCA.
4- Evolución del entorno de cumplimiento: En la última década se ha producido un cambio notable en el entorno de aplicación de la normativa, que se ha centrado en las sanciones por infracciones pero no ha hecho suficiente hincapié en la elusión fiscal con inversiones en el extranjero. Las limitaciones presupuestarias y la dinámica política que rodea al IRS han obstaculizado la eficacia de los esfuerzos de aplicación.
5- Llamamiento a la acción y al liderazgo: A pesar de los retos, existe una llamada a la acción para que EE.UU. asuma un papel de liderazgo en la lucha contra la elusión fiscal y garantice la equidad fiscal mundial. Se necesita voluntad política e inversión en marcos de aplicación para impulsar el cumplimiento y servir de ejemplo a otros países declarantes.
Conclusión
En conclusión, la última década ha aportado importantes conocimientos sobre el cumplimiento de la normativa. Desde la lenta adopción de normativas como CRS y FATCA hasta la evolución de los entornos de cumplimiento y los precedentes históricos, se pueden extraer valiosas lecciones tanto para las empresas como para los organismos reguladores.
Los testimonios de expertos del sector como Dave Olenzak y Dan Peak arrojaron luz sobre los retos y las oportunidades inherentes a los esfuerzos de cumplimiento. Al reflexionar sobre estas ideas y anticiparse a las futuras tendencias normativas, las empresas pueden posicionarse mejor para navegar por las complejidades del cumplimiento y fomentar una cultura de transparencia y responsabilidad.
A medida que avanzamos, las partes interesadas de todos los sectores deben mejorar proactivamente sus prácticas de cumplimiento. Animamos a los lectores a reflexionar sobre sus prácticas de cumplimiento e identificar áreas de mejora, teniendo en cuenta las ideas compartidas en esta entrada del blog.
